Francisco Javier Vázquez de Prada, subdirector del colegio Montessori de Salamanca, impartió a principios de este mes de febrero una conferencia bajo el título “La nueva educación diferenciada. Un modelo educativo para la igualdad”. El acto fue organizado por la plataforma “Mis padres deciden”. Su portavoz, Dª Gemma García, presentó al ponente resaltando que “el Colegio Montessori de Salamanca lleva tres años modificando todas sus líneas de educación mixta a diferenciada, de forma que ya alcanza toda la etapa de Educación Infantil y el próximo curso comenzarán con 1º de Educación Primaria, con clases solo para chicos y solo para chicas”.
Vázquez de Prada inició su alocución destacando que “en nuestro colegio observamos que, tras el camino recorrido, la solución idónea era implantar la educación diferenciada con idea de mejorar los datos académicos. Consideramos que la auténtica segregación, hoy en día, se llama fracaso escolar”. Para argumentar esta frase, quiso separar con claridad “la educación diferenciada de ahora con la de hace 80 ó 100 años. Antes el ámbito público era de los varones y el hogar para las mujeres, por lo que cada sexo recibía una educación determinada para cada función, lo que sin duda se convertía en educación segregada. Hoy ambos tienen las mismas funciones y derechos, lo cual no es óbice para que reciban una educación adecuada a sus necesidades”.
De esta forma, “nace la educación mixta, que piensa que, como iguales, debemos recibir la misma educación, con idéntica metodología, lo que llevará a la igualdad. Sin embargo, la educación diferenciada actual parte de la base de que ambos sexos son diferentes, con los mismos derechos, pero que deben recibir una metodología aplicada a sus características, sensibilidades e inquietudes”.

Utilizando su colegio como ejemplo, Vázquez de Prada ofreció una serie de datos estadísticos del rendimiento escolar en chicos y chicas, aderezando con ejemplos prácticos las diferencias entre ambos. Además de destacar el alto porcentaje de sobresalientes en ellas con respecto a ellos, o a la inversa en los suspensos en primera evaluación, destacó que “lo más sangrante y sorprendente es que este problema, de dominio público, no produce alarma social ni reacción alguna en la comunidad educativa, por lo que como dice el informe PISA, el sistema educativo español se deja atrás a un tercio de los alumnos”.
Desde un punto de vista médico-científico, el ponente indicó que “muchos estudios también demuestran esta diferencia de la que hablamos. Hugo Liaño, jefe de neurología clínica del Hospital Puerta de Hierro, afirmó en su momento que existe un dimorfismo sexual cerebral. Esto puede ocasionar que las niñas cuenten con más precocidad verbal, prematura madurez física y psíquica, facilidad para la conversación, relaciones, emotividad, previsión, organización, psicomotricidad fina…”. Por su parte, “los chicos necesitan movimiento, su concentración-distracción es potente, son más confiados, les gustan los retos…”.
El ponente culminó su charla indicando que “en EE.UU., en 1972, se prohibió por ley la educación diferenciada en la escuela pública, se consideraba discriminación. Sin embargo, en octubre de 2006, el departamento de Educación de EE.UU. modificó la ley y legalizó los colegios públicos con educación diferenciada, tras realizar diversos estudios que certificaban la eficacia y mejora de rendimiento escolar de los alumnos con este modelo”.