«La educación personalizada que tenemos en Altair hace posible sacar lo mejor de cada persona»
¿Qué recuerdos tienes de tus inicios como profesor en Altair?
Lo que más recuerdo de mis inicios en Altair es la gran capacidad de recibimiento y acogida por parte de todo el personal del colegio. Acababa de llegar y ya me querían, de inmediato me sentí parte integrante de una gran familia. Durante mi primer año en Altair nació el mayor de mis hijos, con lo que en lo personal, mi familia también crecía. Me sentía muy afortunado y descubrí que Altair es un verdadero colegio de las familias.
Una de las señas de identidad de Altair es la educación personalizada, ¿nos puedes explicar en qué consiste y cómo se aplica en ESO?
La educación personalizada es algo muy de moda que se pone en práctica en Altair desde sus inicios. Nuestro colegio siempre ha ido por delante en este sentido. Cuando realizo las entrevistas de admisión suelo comentar a los padres que los profesores de Altair somos expertos en personas. Nos ocupamos tanto de la formación académica de los alumnos como humana, por lo que no sólo queremos ser los mejores en Matemáticas, Inglés o Francés, sino que nos ocupamos también de su integración en el colegio, de su dimensión social y personal, de las posibles dificultades, en definitiva de sus problemas. No sólo el rendimiento de cada alumno es diferente, sino también sus circunstancias y ambas cosas van muy unidas.
¿Qué aporta Altair a sus alumnos de ESO como valor diferencial respecto a otros centros educativos?
Son muchas las cosas que me gustaría comentar en este sentido, pero intentaré ser breve. Las edades en las que los alumnos llegan a la ESO, son edades de descubrimientos, de rebeldías y de autoconocimiento. En esta etapa evolutiva, la persona sufre muchos cambios que le provocan una desazón constante, y necesita la ayuda de profesores referentes que le ayuden a visualizar un proyecto personal prometedor, acompañándoles y sobre todo queriéndoles. Lograrlo es toda una garantía de felicidad, ¿qué más se puede pedir?
También, desde sus inicios hasta por 1967 Altair apostó por el modelo de educación diferenciada, ¿en qué medida este modelo ayuda a conseguir el éxito educativo de Altair?
La investigación y la práctica educativa reconocen que la educación diferenciada obtiene muy buenos resultados académicos y tiene tasas de fracaso escolar por debajo de la media. Además, en barrios humildes como donde está Altair (de los más pobres de España) es un gran instrumento en la formación integral de los alumnos, no sólo en aspectos académicos sino también en cuestiones de liderazgo, de socialización y reducción de estereotipos. En este sentido la educación personalizada que tenemos en Altair, ayuda a sacar lo mejor de cada persona.
Aunque en Altair es un colegio con índices muy bajos de fracaso escolar, por desgracia en Andalucía el índice es muy alto y está por encima de la media nacional, ¿qué se puede hacer hoy en día para que los alumnos acudan al colegio motivados, se esfuercen por estudiar y no abandonen los estudios?
Considero que hay tres grupos sociales a los que pertenece el alumno que son determinantes para garantizar éxito educativo: La familia, el colegio y el entorno social. El éxito o la motivación depende de la capacidad de proyectar a la persona hacia el futuro en cada uno de estos grupos de pertenencia y para ello hay que pensar en los demás y quererles de verdad, no con exigencias sino con excelencia. Difícilmente la motivación será producto de la falta de respeto, del maltrato y de la ausencia de cariño.
Muchos de tus alumnos están en la universidad, ¿puedes contar alguna anécdota de algún alumno que sea un ejemplo de superación? ¿Qué te dicen los antiguos alumnos que te encuentras?
Tengo muchas anécdotas pero voy a contar la que viví hace dos sábados. Tras la jornada de puertas abiertas del colegio, me dirigí a comprar al supermercado que hay al lado de Altair. Cuando me dispongo a colocar la compra en la cinta para el pago, me encontré con José Manuel –un alumno que terminó bachillerato hace dos o tres años-. Me quedé extrañado porque sabía que estaba estudiando en la Universidad y entonces le pregunté qué hacía allí. Me contó que estaba estudiando y trabajando al mismo tiempo, con la ilusión del que sabe que va por buen camino, con una sonrisa en la cara que delataba satisfacción y alegría. Un alumno que apoyado por la familia, por el colegio y por su entorno social llegará lejos. Cuando terminamos la conversación, me sentía muy orgulloso y satisfecho de haber puesto mi granito de arena en su formación. Me quedé con las ganas de charlar más pero no era el momento.
Un porcentaje bastante alto de alumnos cuando llegan a ESO disponen de móvil. Sobre el uso del móvil, redes sociales, videojuegos, etc. ¿Cómo ve este fenómeno de «hiperdigitalización» e «hiperconexión» de los niños que existe actualmente? ¿Qué le suele recomendar a sus alumnos? ¿Qué recomendaría a los padres?
A los padres les diría que intenten evitar la exposición a las redes sociales y a internet, que ellos mismos dieran ejemplo. Que pongan límites y controles parentales para no facilitar el uso indiscriminado de los medios. Es fácil encontrar en sus dispositivos contenidos poco o nada adecuados para su edad.
A los alumnos les recomiendo principalmente que negocien con los padres y que respeten las normas. Les animo a leer más y a olvidarse del Whatsapp, del Instagram, etc. Les aconsejo dejar los juegos para el fin de semana y buscar otro tipo de actividad deportiva para la semana, pero sobre todo les animo a comprender los peligros a los que se enfrentan.
Paralelamente, la lectura es un déficit que tienen muchos niños de hoy en día. ¿Qué sugerencias daría en este sentido? ¿Es tan importante la lectura?
Efectivamente, la lectura tiene muchos beneficios, ya que pone en marcha mecanismos intelectuales que desarrollan destrezas orales y de comprensión. En el colegio hacemos mucho hincapié en la lectura y así reforzamos la misma acotando momentos dentro de cada asignatura para tal fin. Generalmente, se suele indicar en las programaciones y en los criterios de evaluación. No obstante, el mejor ejemplo se debe dar en casa, desde pequeñitos, leyendo cuentos. Si los padres leen, muy probablemente los hijos también lo harán.
Finalmente, ¿en qué medida es útil la formación cristiana que se imparte en el colegio?
Útil no, sino primordial. La formación cristiana es la base y fundamento de nuestro ideario y de nuestra misión. Queremos mejorar la sociedad a través de la familia, poniendo el foco en la educación integral de nuestros alumnos. Estamos convencidos de que con alegría, esfuerzo y un poquito de Fe conseguiremos no sólo alumnos preparados para una sociedad exigente sino cristianos excelentes, dispuestos a entregarlo todo. Esto es posible gracias a que todo el que participa de los medios de formación amplía su visión del mundo, es decir, comienza a visualizar una antropología en la que el ser humano tiene una gran capacidad de mejora personal. Esto es sumamente atractivo. El ser humano puede trascender y no quedarse en lo meramente superficial y además, en Altair, es fácil experimentarlo: una visita a un anciano, pintar la casa de una familia sin recurso alguno, una cesta de Navidad para el necesitado, una recogida de juguetes usados, un rastrillo solidario y una aportación voluntaria adquieren un valor transformador inigualable. En definitiva, generamos un caldo de cultivo espectacular para los hombres del mañana porque estarán educados para avanzar, para sumar, para amar y sobre todo para transmitir no sólo nuestras costumbres sino nuestras raíces cristianas y nuestra fe.